El gobernador de Magallanes (Chile), Jorge Flies, calificó las declaraciones de Torres como “lamentables” y recordó que ambos países mantienen “una larga tradición y también un acuerdo de libre tránsito en nuestras rutas terrestres”, el cual ha sido clave para el abastecimiento y la integración de zonas aisladas como la región austral chilena.

“Limitar o prácticamente amenazar el tránsito de camiones, especialmente de Magallanes, es complejo. Hay que recordar que nuestra región depende en más de un 90% del abastecimiento por vía terrestre”, expresó Flies, quien además destacó el importante esfuerzo que ha hecho el Estado chileno en mantener y construir rutas, particularmente en Tierra del Fuego, que benefician principalmente al transporte argentino hacia localidades como Río Grande y Ushuaia. “Chile ha hecho un esfuerzo gigantesco en la conservación de rutas, que hoy día son un orgullo en nuestro territorio”, agregó.

Por su parte, la Unión de Transportistas Magallanes (UTRAMAG A.G.) emitió un comunicado oficial rechazando categóricamente las afirmaciones del gobernador Torres. En el documento, fechado el 9 de junio, el gremio advierte que las declaraciones “carecen de conocimiento técnico y están faltando a la verdad”, al no reconocer que los camiones chilenos son fiscalizados regularmente por Vialidad Nacional Argentina en distintos puntos de ingreso y egreso del país, incluyendo el Paso Cardenal Samoré, el Resguardo Rincón y el Paso Integración Austral.

Asimismo, UTRAMAG recordó que según el artículo 21 del convenio binacional de transporte terrestre, tanto transportistas chilenos como argentinos están exentos de pagar gravámenes, tasas o comisiones al circular entre dos puntos del mismo país, siempre que lo hagan en horario hábil. En ese sentido, apuntaron que Chile respeta este acuerdo y no cobra a los transportistas argentinos, incluso fuera del horario establecido, a diferencia de lo que ocurre en territorio trasandino.

El gremio también cuestionó la falta de fiscalización a camiones argentinos que circulan hacia Tierra del Fuego con exceso de peso, señalando que “varios de estos camiones circulan a Río Grande y Ushuaia con 50, 60 y hasta 70 toneladas”, sin ser detenidos o sancionados.

Ante este panorama, tanto el Gobierno Regional como los transportistas locales llamaron a resolver este tipo de controversias a través del diálogo diplomático entre las cancillerías y los ministerios de Transporte de ambos países, evitando medidas unilaterales que afecten la histórica relación de colaboración y tránsito libre en la Patagonia binacional.

Fuente: El Magallánico