

Durante el encuentro, se destacó la urgencia de construir una red nacional de apoyo político, sindical y empresarial para frenar un modelo que apunta directamente contra el trabajo argentino y la producción nacional.
Zamora fue contundente: “Es alarmante la situación que se esta viviendo y como podría impactar en el empleo local, mientras algunos sectores empresarios como primera reacción hablaron de despidos masivos que van a arrastrar a toda la cadena económica de Tierra del Fuego. Hay que plantarse y defender con claridad lo que tanto costó construir”.
Bilanski, en la misma línea, advirtió: “Tierra del Fuego es solo el primer paso de una política profundamente anti industrial. No parece una medida contra las empresas, sino contra los trabajadores. Es una entrega directa de nuestro mercado al capital extranjero”. Finalmente, Zamora y Bilanski coincidieron en trabajar una agenda común vinculada con distintos sectores en clave a las necesidades de desarrollo.